Perder peso con qigong

Todo el mundo habla de la dieta china. En la mayor parte de los casos, mienten. Hay que tener cuidado porque cualquiera dice que hace qigong, pero no es verdad. La gran mayoría ni siquiera son médicos. En el tratamiento habitual de qigong, no se dan alimentos porque gracias a la energía de la respiración y a los masajes, no hace falta.

Los pacientes soportan perfectamente el ayuno. Esto es Importante porque muchos especialistas que aseguran saber de qigong sí le dan comida a sus pacientes y así cualquiera soporta el tratamiento porque la energía viene de la comida. Con cualquier dieta se disminuye el peso, pero no tanto. En cambio, con el verdadero qigong se pierden entre 5 y 8 kilos en diez días. Con energía de verdad, no se come nada y se puede seguir haciendo la vida normal.

Parece mentira, pero los pacientes se sienten cada día mejor, y hasta dejan de tomar medicamentos para dormir. Por supuesto, una vez que se bajó de peso con el ayuno, se enseña a la gente a comer correctamente, porque si se vuelve a comer como antes, será inevitable subir de peso.

Tratamientos con qigong

Este método tiene dos etapas que se realizan en forma simultánea: los ejercicios respiratorios y el ayuno.

Los ejercicios respiratorios son tomados del qigong para trabajar con el campo de energía vital. Mediante su práctica se le enseña al paciente el camino olvidado de la producción metabólica de energía y su circulación.

Estos ejercicios son tres: uno para quitar el hambre, otro para quemar grasas y el tercero es para la salud general. El hecho de que el hambre desaparezca, a pesar de no ingerir alimentos sólidos, se explica por la circulación energética especial que proporciona la respiración. Estos ejercicios deben ser realizados diariamente, tanto en el hogar como concurriendo al consultorio, donde el médico estimula con masajes determinados puntos energéticos.

Además de sus propias manos, el doctor Xu Shen Liang cuenta con un equipo mecánico que trabaja con ondas vibratorias. Este aparato produce  la misma estimulación que los masajes y actualmente, según explica el especialista en China es el método más utilizado, porque la máquina presiona con mayor exactitud el punto energético y además se la puede calibrar al grado de vibración que cada paciente necesite.

La otra parte del programa es el ayuno, que se hace en base a líquidos, fundamentalmente agua con limón, té y un cuarto litro de caldo colado, conseguido de verduras verdes, lo que permite el rápido descenso del peso. En el pensamiento chino la práctica del ayuno se considera como un período de purificación para el ser humano. Pero un ayuno para que no resulte peligroso, debe hacerse con control médico permanente.

En general, las personas se sienten bien gracias al qigong y siguen trabajando y haciendo su vida normal, aunque sin practicar ejercicios físicos. Pero puede suceder una hipoglucemia y en ese caso el médico va a indicar la ingestión de jugo de naranjas durante dos días, y luego la vuelta al ayuno, para continuar la pérdida de peso. Luego de este período, el paciente debe comenzar a ingerir ritualmente sus alimentos sólidos y de esta forma mantener el equilibrio entre el yin y el yang. Esa es la clave para conservar Indefinidamente el peso alcanzado.

ADIOS A LAS GRASAS

Xu Shen Liang, es el precursor del método chino para adelgazar en Latinoamérica. Estudió medicina en la universidad de Zhejiang, en China Popular y allí se recibió de médico responsable (un título que equivale a médico clínico). El primer lugar en el que aplicó sus conocimientos orientales para ayudar a adelgazar fue en la ciudad de Montevideo, Uruguay.

 Así desarrolló un método de adelgazamiento rápido que en 10 días asegura bajar entre 5 y 8 kilos. Una promesa que para cualquier obeso resulta mucho más tentadora que una torta de chocolate. Esto hizo que en sólo cinco años hayan concurrido a su consultorio de la capital uruguaya más de .7000 pacientes de entre 11 y 80 años, incluidos algunos deportistas famosos como el  futbolista Diego Armando Maradona. A través de su experiencia profesional el doctor Liang se siente en condiciones de afirmar que el método sirve no sólo para adelgazar sino para lograr un mejoramiento del estado general de los pacientes.

En efecto, la obesidad está considerada una enfermedad, es decir que es el desequilibrio del yin (polaridad negativa) y el yang (polaridad positiva), debido a los malos hábitos o a la inadecuada combinación de los alimentos. Este desequilibrio afecta principalmente a las visceras que forman el yin (corazón, hígado, pulmones, ríñones y bazo) y a las que forman el yang (estómago, vesícula, vejiga, intestino grueso y delgado, esófago, píloro y uréter), Al no funcionar correctamente o en perfecta armonía producen determinados síntomas que son frecuentes en las personas obesas: angustia, ansiedad, hambre, nerviosismo y depresión. El qigong se aplica para equilibrar esos síntomas, cambiando el metabolismo, hasta lograr que el organismo trabaje normalmente, manteniéndolo  sano.

EFECTOS VISIBLES del QIGONG

Los efectos benefactores de esta gimnasia no se hacen esperar. Desde la primera práctica uno se siente más distendido. La prueba de que todo circula mejor son los cosquilieos en las manos y el calor en todo el cuerpo. Pero lo que verá si lo practica con constancia, es que se sentirá:

-Más calmo. El bienestar general es lo primero que aparece. Se respira más tranquilamente, haciendo evidente el efecto de la relajación. No es una sorpresa: uno se siente reposado porque el curso se hace en un silencio total, apenas interrumpido por las ocasionales indicaciones que da el profesor.

-Más dinámico. Al fin de la sesión se gana una maravillosa sensación de dinamismo. Uno se siente fresco y dispuesto, listo para actuar. Generalmente, la gente llega cansada después de una jornada de trabajo, pero después de la clase no es raro sentir ganas de volver caminando a su casa. Esto es normal, porque durante la práctica se liberaron ciertos bloqueos y la corriente se renovó. Sucede algo similar en el entrenamiento de base de todas las artes marciales, que es el momento en que se juntan fuerzas antes del combate.

-Más liviano. Una mejor respiración significa una mejor oxigenación y entonces, mejor asimilación de los alimentos. Es frecuente dormir mejor. Pero puede pasar que al principio cueste conciliar el sueño, debido a un exceso de energía por el momento mal canalizada. Ello no es grave, porque todo se pone en orden en cuestión de días.

LA GIMNASIA DEL QIGONG

El qigong es, ante todo, una gimnasia de salud cuyo fin es restaurar el justo equilibrio entre el cuerpo y el espíritu. Así se practica:

- El movimiento invisible
En apariencia nada se mueve o casi. Los brazos y las manos se elevan con suavidad, dibujando en el espacio círculos y espirales. El tronco y la cabeza pivotean lentamente alrededor de su eje central, mientras que el peso del cuerpo se desplaza apenas de una pierna a la otra o de adelante hacia atrás. Una danza silenciosa en la que se mantienen los ojos cerrados para concentrarse, donde las figuras parecen repetirse sin fin, en un orden inmutable. El espectador desconcertado o atraído, comprende enseguida que todo sucede en el interior. Porque, aunque no hay ningún esfuerzo muscular visible desde el exterior, adentro todo se está moviendo.


- Respiración enriquecida.

El qi es, para la medicina china tradicional, el principio de la respiración vital, que anima a todo ser viviente y que liga el cuerpo y el espíritu al cielo y a la tierra, al cosmos. Si esta energía vital se halla en cantidad suficiente y circula bien en el organismo, éste se comporta bien. Entonces hay equilibrio entre el yin y el yang, esas dos energías opuestas, complementarias e indisociables. Pero este equilibrio no es estático. Está siempre en movimiento. Cuando se fortalece la respiración se está al mismo tiempo enriqueciendo la sangre. 

Las dos circulaciones están estrechamente ligadas, si la sangre circula mejor, los órganos están bien irrigados y los diferentes metabolismos celulares se ejecutan mejor. La finalidad profundamente dinamizante del gigong es ayudar a una mejor circulación de los flujos energéticos. Es por eso que siempre se realiza una sucesión de movimientos lentos (jamás posturas estáticas). Todo se encadena y nada se detiene. La energía corre dentro del cuerpo, así como el verano sucede a la primavera, y el calor sigue al frío.

LAS APLICACIONES DEL QIGONG

2.500 años antes de Cristo las inundaciones y el clima húmedo de la China central provocaban enfermedades como artritis, dolores musculares y afecciones de la piel. Para evitar estos males e invocar a las fuerzas sobrenaturales, los habitantes de la región crearon una danza ritual cuyos movimientos resultaron notablemente beneficiosos para la salud y la bautizaron qigong. A lo largo de los siglos, esta danza fue evolucionando y desarrollándose hasta que en 1949 comenzó a aplicarse en el campo de la medicina, la enseñanza y las investigaciones científicas.

El qigong suele emplearse para males crónicos, aunque también resulta efectivo para curar enfermedades agudas y lesiones de los huesos, También se aplica en hipertensión, enfermedades coronarias, secuelas de accidentes cerebro-vasculares, parkinsonismo, neurosis, hepatitis, cirrosis, anemia, diabetes, miopía e inflamaciones ginecológicas. Además, ayuda a atravesar circunstancias traumatizantes como la anestesia quirúrgica, senectud, desarrollo intelectual de la adolescencia y adelgazamiento. Durante los últimos años el qigong trascendió todas las fronteras imaginables.

Los deportistas lo están adoptando para relajar los músculos, aumentar la circulación y mejorar las condiciones físicas y psicológicas para las competiciones, y en  algunos ejércitos se aprende para elevar la capacidad combativa, el autocontrol y la supervivencia de los soldados en situaciones de apuro y depresiones. Actualmente, se investigan sus efectos en el tratamiento del cáncer, para disminuir los efectos de la quimioterapia y en las terapias de rejuvenecimiento, pues según los estudios al respecto, los efectos de la buena respiración alargan de siete a diez años la vida del practicante de qigong.

EL DOMINIO DE LA RESPIRACION

El qigong propone varios métodos para dominar la energía a través de la respiración. Hay 8 formas básicas de practicar los ejercicios respiratorios: respiración natural, de limpieza, de tortuga, alternada, profunda natural,  prolongada y prenatal.

Los ejercicios de qigong se inician haciendo uso del yin (esencia) que es convertido en qi (aliento) cuya purificación da lugar al sheng (energía espiritual) que en la tercera etapa se sublima para retomar a la vacuidad shu. De este modo, el qigong ayuda a que la energía fluya por todos los canales, estimulando el funcionamiento del organismo. La teoría general de la filosofía china dice que toda manifestación de vida está regida por la ley del ritmo a dos tiempos: yin y yang.

Lo que hace el qigong es activar la circulación del qi (energía)  por los jing (canales), y ésta circula continuamente y en el mismo sentido de un canal yin a un canal yang. Existen ocho canales maravillosos y doce principales. Mediante el qigong se unen los canales maravillosos que son el vaso cogobernador y el vaso concepción, y que se encuentran separados. Cuando se unen, gracias a la respiración qigong, dan lugar a una circulación en forma de anillo llamada pequeña circulación celeste u órbita microcósmica, que es la base de todo trabajo para fortificar el qi.


Hasta aquí la explicación textual tomada literalmente de las aplicaciones orientales. Todo esto, que para un occidental puede parecer ni más ni menos que chino básico, ya ha sido comprobado en cierto modo por la ciencia moderna que, incluso, corroboró los efectos de una buena respiración: se sabe que la fricción del aire contra las mucosas nasales activa la hipófisis, epífisis, tiroides y otras glándulas, lo que se traduce como un mejoramiento o desaparición de síntomas de vértigo, zumbidos, cólera, timidez, mala digestión, pérdida de memoria, palpitaciones e insomnio.

LA EVOLUCION DEL QIGONG

El qigong es el uso de la respiración para desarrollar el qi , con propósitos especiales como sanar, curar, evitar o combatir el envejecimiento. Qi, significa el cielo, es el movimiento y es la respiración. Gong es fuerza, trabajo muscular. En China se aplica qigong desde muchos siglos atrás. Puede leerse en el Clásico de la Medicina del emperador Huangdi, que tiene 4.500 años de antigüedad que "muchas enfermedades se originan en los resfríos y las inflamaciones. Por ello, lo más conveniente es realizar ejercicios terapéuticos en lugar de tratarse con medicamentos" .

Los primeros ejercicios taoístas se denominaban daoyin y se practicaban para alcanzar el estado de inmortalidad. Los taoístas consideraban que la vida se alargaba desarrollando la capacidad de dirigir la respiración profunda, es decir, de dominar el cuso del qi. A lo largo de los siglos se siguieron practicando por otras escuelas: la  confucionista, la budista, la wushu -artes marciales-, el zaija hasta llegar a la médica.

Fueron denominados de varias maneras: daoyin (conducción del flujo energético), tunate, yingzuo, zuochan, neigong, lianqi hasta popularizarse como qigong. El término qigong aparece por primera vez en 1936, en la Obra terapéutica específica para la tuberculosis durante la dinastía de los Yin. Allí consta el principio fundamental de este método:

"Hay que respirar el aire puro y atender a regular la respiración, para preservar el espíritu y mantener los músculos relajados".

QIGONG: EL ARMONIZADOR DEL PESO

No se puede vivir del aire. Esta afirmación popular tan evidente, tal vez no sea completamente indiscutible. Eso parece asegurar un nuevo método para adelgazar llegado de China. Se conoce como qigong y dicen quienes lo probaron que es sumamente sencillo y que se pueden soportar hasta diez días de ayuno sin sentir el mínimo malestar. Pero el qigong, si bien se hizo célebre por sus virtudes para hacer adelgazar a obesos impacientes, paradójicamente es una disciplina que exige constancia y una proverbial paciencia china.

No se aprende de una vez y para siempre en un curso acelerado. Sus practicantes más fieles saben que se trata de una forma de vida que persigue no sólo el bienestar físico, sino también el espiritual. Tal vez por sus maravillosos efectos y su relativa simplicidad (lo único que se necesita para aprenderlo es un poco de aire) esta práctica se esté haciendo cada día más popular. Así lo prueba el hecho de que es practicado por uno de cada veinte chinos, para conservar la salud, según la Asociación de Investigación Científica de Qigong de China, además de la creciente cantidad de institutos que ofrecen su enseñanza en nuestro país.

Tratamiento homeopático

La homeopatía otorga al paciente en tratamiento cualidades esenciales para combatir la obesidad:

• Fuerza de voluntad
• Buen humor
• Disminución de la ansiedad oral
• Equilibrio emocional
• Mayor tolerancia al estrés.

Una de las características esenciales de la homeopatía es que aplica un medicamento específico para cada persona según su historia de vida, lo que significa que aunque varios pacientes sean tratados por la misma enfermedad, pueden tomar remedios diferentes. Por otra parte, no existe un medicamento indicado especialmente para adelgazar, ya que la medicina está prescripta para sanar un conflicto en particular, que es el que produce el sobrepeso.