Según la medicina tradicional china, los problemas de vista se deben en gran parte a un desequilibrio en los principales órganos internos: hígado, bazo, ríñones, corazón y pulmones. Este desequilibrio puede ocasionar afecciones como conjuntivitis, irritación, hinchazón de párpados y debilitamiento de la visión. Con el objetivo de tonificar los órganos y reflotar las energías, esta terapia interviene en el organismo de tres formas:
Ejercicios dinámicos y estáticos con la finalidad de regular las funciones del hígado y de los pulmones, reforzar el bazo y el corazón y tonificar los ríñones; y favorecer la circulación energética en los meridianos y la circulación sanguínea a la altura del cuello y de la cabeza.
Automasaje de los puntos de acupuntura relacionados con la salud de los ojos.
Ejercicios de meditación y de visualización para armonizar la relajación mental con la corporal.
Antes de comenzar, es necesario tener en cuenta ciertas cuestiones. Es conveniente elegir un horario que sea cómodo, por la noche antes de la cena, o por la mañana al levantarse. Ciertos ejercicios rápidos pueden ser realizados en cualquier momento, incluso en una pausa durante el trabajo. No hay que desistir, y es más importante un cuarto de hora diariamente que una hora tres veces por semana. En esta relación ce calidad por sobre cantidad, es mejor hacer poco con calma y concentración, que muchos ejercicios a las apuradas.
El momento del día elegido para el qigong debe ser sagrado. Es preferible buscar un lugar tranquilo y evitar cualquier tipo de interrupción.
Ejercicios dinámicos y estáticos con la finalidad de regular las funciones del hígado y de los pulmones, reforzar el bazo y el corazón y tonificar los ríñones; y favorecer la circulación energética en los meridianos y la circulación sanguínea a la altura del cuello y de la cabeza.
Automasaje de los puntos de acupuntura relacionados con la salud de los ojos.
Ejercicios de meditación y de visualización para armonizar la relajación mental con la corporal.
Antes de comenzar, es necesario tener en cuenta ciertas cuestiones. Es conveniente elegir un horario que sea cómodo, por la noche antes de la cena, o por la mañana al levantarse. Ciertos ejercicios rápidos pueden ser realizados en cualquier momento, incluso en una pausa durante el trabajo. No hay que desistir, y es más importante un cuarto de hora diariamente que una hora tres veces por semana. En esta relación ce calidad por sobre cantidad, es mejor hacer poco con calma y concentración, que muchos ejercicios a las apuradas.
El momento del día elegido para el qigong debe ser sagrado. Es preferible buscar un lugar tranquilo y evitar cualquier tipo de interrupción.
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